Previous Lesson -- Next Lesson
6. ¿Ya has aceptado la salvación que Dios ha preparado para ti?
A una mujer de la India sin educación le preguntaron por su fe en Cristo. Ella respondió: "Su sangre limpió mi corazón de todos mis pecados". Esta mujer analfabeta había experimentado el secreto más íntimo de la salvación. Quien conoce a Cristo y comprende su sacrificio, rápidamente lo acepta por fe y le entrega su vida impura y perversa. Entonces la seguridad de la salvación llegará a su corazón y la justificación de Dios sellará su mente.
Recuerda que Cristo no necesita volver a morir por tus pecados. Él te ha justificado una vez y para siempre. Cree en este hecho. Sé valiente y agradece al Todopoderoso que te haya concedido gratuitamente la justificación. Él te ama personalmente, porque sacrificó a su amado hijo por ti y por todo el mundo. La salvación se ha consumado. ¿La aceptas de verdad? Entonces tendrás una nueva comprensión de Dios como perdonador misericordioso y como océano de amor.
¿Entiendes cómo aceptar esta salvación de forma práctica? No es difícil. Arrodíllate en un lugar tranquilo o en una habitación cerrada, solo o con un amigo creyente y ora de todo corazón:
Prosigue con esta oración:
Querido amigo: Cree en lo que has orado, porque Dios te escucha. Sé fuerte en la fe y habla con el Dios misericordioso según te guíe el corazón. Habla y no calles, porque Dios es amor. Él consumó la salvación para ti y para todo el mundo hace mucho tiempo. Ten presente que esta justificación, firmada por la sangre de Jesucristo, es tu máximo certificado. El Cordero de Dios te libera del pecado y santifica tu vida. Confía en las promesas de Dios, y oirás la voz del Espíritu Santo asegurándote tu fe:
En ese momento, la paz de Dios llenará tu alma. Te convertirás en una persona nueva. Es imperativo que aceptes tu salvación con acción de gracias. No lo pospongas, porque Cristo te ha salvado. Tú eres el responsable de este privilegio en tu vida. El Espíritu Santo te lo advierte: