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2. Vuelve a Dios con todo tu corazón
La mayoría de la gente vive lejos de Dios. Comen, beben, se casan y corren detrás de cosas sin valor, comportándose como si no tuvieran conciencia. Llevan pecados secretos en sus corazones, sin darse cuenta de que están en el camino descendente hacia el infierno. A veces incluso fingen ser muy religiosos, pero están lejos de Dios. Sus corazones son duros y crueles. Su fanatismo les lleva más y más profundo en el pecado, como dijo Cristo:
Querido lector: Te exhortamos, ¡vuelve al Dios vivo! Él no te creó en vano. Te ama con amor eterno y vuelve su rostro hacia ti. Si vives sin tu Creador y lo rechazas, estás perdido, vagando sin rumbo. Tu alma permanecerá vacía y desesperada, pues te falta el secreto de la revelación divina:
El Dios eterno y santo quiere concederte la bondad de su amor e insuflarte su Espíritu para que vivas una vida digna de llamarse ¡Vida! Mira al Señor, porque se acerca a ti, según su fiel promesa:
Un joven que vivía entre adoradores de ídolos leía sobre las religiones de judíos, cristianos y musulmanes. Se perdía en sus diferencias y a menudo se preguntaba: "¿Es Dios uno o tres, o tres en uno? ¿Cuál es el camino correcto? ¿Dónde está la verdad?". Se sintió confuso y clamó desde lo más profundo de su desesperación, orando al cielo: "¡Oh Dios! Si existes, ¡revélate ante mí! Quiero conocerte, vivir contigo y que me mantengas en tu poder. Ya no puedo vivir sin ti".
Dios respondió al ruego de su corazón. Poco después el joven cuando volvía a casa desde su oficina, encontró un trozo de papel amarillo tirado en el suelo y leyó en él: "Si quieres saber más sobre Dios, escribe al 'Centro para Jóvenes Adultos'. Te enviarán explicaciones de la Sagrada Biblia sin coste alguno". Les escribió de inmediato y pronto le llegó un paquete lleno de folletos y libros. Al abrir el paquete, lloró de alegría porque comprendió que el Dios vivo había respondido a su oración. Estudió la Biblia con detenimiento y pronto llegó a conocer al único Dios verdadero. Como resultado de su nueva fe, su comportamiento y su vida cambiaron. Caminó por la senda correcta y se convirtió en un fiel siervo del Señor.
Querido lector: Ven al Dios vivo porque te está esperando. Mientras te alejes de él estarás perdido en las tinieblas. Acércate a tu Creador y rechaza todas las mentiras de los ateos. No seas como ellos. Hace tres mil años el profeta David escribió:
No sigas el camino de los ateos. Apártate de sus mentiras. Abandona tu soledad y acércate a la luz divina. Tu Señor te llama con su voz compasiva:
Escucha el llamado de Dios y respóndele. Decide con toda tu voluntad volver a tu Señor. Pregúntate: "¿De verdad quiero volver a Dios y buscarle de todo corazón?". No basta con tener una buena intención; necesitas tomar una decisión definitiva. Si de verdad buscas a Dios, Él vendrá a ti, te curará y te salvará por completo.