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2. Las preguntas de los discípulos (Mateo 24:3)
MATEO 24:3
3 Más tarde, estaba Jesús sentado en el monte de los Olivos cuando llegaron los discípulos y le preguntaron en privado: —¿Cuándo sucederá eso y cuál será la señal de tu venida y del fin del mundo? (Hechos 1:6-8)
Mientras se dirigían al Monte de los Olivos, los discípulos llamaron la atención de Cristo sobre la grandeza del templo. Sin embargo, Cristo vio su vacío y la destrucción que se avecinaba debido a los pecados de su pueblo. Sus palabras desgarraron la esperanza que vivía en sus seguidores. El diseño del amor de Dios no se encuentra en edificios hechos de cemento y acero, cubiertos de oro y llenos de incienso, sino en el templo espiritual que se edifica con "piedras vivas". Este templo está formado por creyentes llenos del Espíritu Santo, que sirven a Dios en un mundo corrupto. ¿Te has convertido en una piedra viva en el templo de Dios? ¿O aún pareces una piedra inútil arrojada al campo? Pon tu vida a disposición de Cristo para que él pueda moldearte y hacer de ti una persona útil para siempre.
El templo del Antiguo Pacto debía caer para que el templo del Nuevo Pacto pudiera establecerse en su lugar. Los discípulos de Cristo en ese tiempo no podían desprenderse del antiguo santuario porque no podían imaginar un templo nuevo y mejor. Temblaban ante la destrucción y el fin inminente del centro de su civilización. Tenían miedo por sus vidas, vecinos y amigos. No comprendían plenamente la llegada del reino de Cristo, pero preguntaron al Señor exactamente cuándo y cómo sucedería esa gran destrucción y cuándo aparecería el reino de Dios. Deseaban la llegada del reino divino, pero sin dolor ni destrucción.
¿Temes al futuro? ¿Te sientes inseguro en medio de la caída de bombas y la muerte de los que te rodean? Anímate y no tengas miedo, aunque tu cuerpo se desgaste, pues todo esto puede indicar que la venida del Señor y la culminación de su reino están cerca a pesar de la creciente oscuridad. ¿Anhelas conocer los acontecimientos futuros? No olvides que todos estos eventos son señales de la segunda venida de Cristo. Las angustias y problemas pueden ser señales de la cercanía del Señor. No pierdas esto de vista en medio de las dificultades que te agobian, sino levanta la cabeza porque tu redención está cerca.
ORACIÓN: Señor Jesucristo, nos regocijamos porque estás viniendo pronto. Anhelamos la manifestación de tu redención. Sálvanos de nuestra superficialidad y negligencia para que no nos parezcamos al templo vacío que brilla solo por fuera. Haz que permanezcamos firmes en el plan de tu Espíritu Santo. Colócanos como piedras vivas en tu nuevo templo espiritual, para aprender la obediencia de la fe y la perseverancia junto con todos los que esperan tu regreso.
PREGUNTA:
- ¿Cuál es el alcance secreto de las preguntas de los discípulos respecto a la destrucción del templo?