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5. Los entregarán a tribulación (Mateo 24:9-14)
MATEO 24:9-11
9 »Entonces los entregarán para que los persigan y los maten, y los odiarán todas las naciones por causa de mi nombre. 10 En aquel tiempo muchos se apartarán de la fe; unos a otros se traicionarán y se odiarán; 11 y surgirá un gran número de falsos profetas que engañarán a muchos. (Mateo 10:21-22, Juan 16:2, 2 Pedro 2:1, 1 Juan 4:1)
Cristo envía su paz a las naciones, ciudades, pueblos y dondequiera que los hombres habiten. Aquellos que creen en él se arrepienten, reciben el perdón y la enseñanza de Cristo, caminan en la pureza del poder del Espíritu Santo y se convierten en luces en medio de la creciente oscuridad. Quienes prefieren el dinero, el poder o la impureza en lugar de Dios, y rechazan el verdadero arrepentimiento, insisten en su propio estado de bondad. Este rechazo de la bondad de Dios endurece gradualmente sus corazones contra la salvación del evangelio. Ellos odian la luz, desprecian a los mensajeros de Cristo y matan a quienes vienen a ministrarles en tiempos de dificultad y adversidad. El espíritu diabólico siempre se opone a Dios y a aquellos nacidos de su Espíritu.
Al final de los tiempos, el odio hacia Cristo aumentará. Las autoridades condenarán a sus seguidores y los responsabilizarán de las aflicciones del mundo. Los cristianos serán odiados por todas las naciones mientras el maligno intenta destruir a los seguidores de Cristo de una vez por todas. No te sorprendas. Aunque Dios muestra su poder y amor a través de ti en un mundo lleno de odio, serás aborrecido y rechazado; quizás incluso expulsado de tu hogar, torturado o asesinado por los enemigos de la cruz. Cristo ofrece una relación con el Creador y vida eterna, pero no nos promete una vida cómoda en este mundo. Sin embargo, en medio de las tribulaciones terrenales, te promete su paz, su presencia y su gozo.
Los tiempos de persecución son tiempos de revelación. Cuando profesar el cristianismo comienza a tener un alto costo, "muchos se apartarán" y abandonarán su fe. Se pelearán con aquello que una vez profesaron, lo descuidarán, se cansarán de ello y, finalmente, se rebelarán contra ello. Los lobos vestidos de ovejas entonces se quitarán sus disfraces y aparecerán tal como realmente son.
La experiencia más amarga es la traición de hermanos y hermanas. El desprecio del mundo hacia los embajadores de Cristo es comprensible, pero el falso testimonio de hermanos y hermanas es doloroso. Nunca odies a un hermano o hermana, incluso si te niegan, porque han caído víctimas del engaño de Satanás. Ora por ellos, ámalos y sopórtalos, como Cristo soportó a Judas, su traidor, hasta el final, diciéndole: "Amigo, ¿a qué vienes?".
El diablo influye en estos desarrollos negativos y miedos a través de engañadores que difunden un falso evangelio, fascinando a las masas con promesas de riquezas. Otros provocan a los piadosos a una falsa santidad mediante leyes que prohíben ciertos alimentos, bebidas y vestimentas. Todos los escritores y filósofos que niegan el amor de Dios expresado en la cruz de Cristo son engañadores, porque no hay redención fuera del Crucificado. Examina los espíritus y no te comprometas con profetas o reformadores, excepto aquellos que glorifiquen a Cristo.
ORACIÓN: Señor del amor, cuánto sufrimos por los golpes de tu juicio contra los desobedientes e incrédulos a quienes amas y buscas redimir. Ellos no son conscientes de tu verdad ni están dispuestos a aceptarte. Perdónalos y perdónanos. Envíanos a ellos y guíanos para declarar tu evangelio con sabiduría y prudencia, para que se vuelvan a ti. Ayúdanos a no temer los golpes de tu ira contra los pecadores desobedientes, sino a esparcir tu salvación y bondad a todos los que se arrepientan y crean en tu amor.
PREGUNTA:
- ¿Qué causa la persecución y la traición de hermanos en los últimos días?