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Previous Lesson -- Next Lesson MATEO - ¡Arrepiéntanse, Porque El Reino De Cristo Está Cerca!
Estudios sobre el Evangelio de Cristo según Mateo
PARTE 4 - LOS ÚLTIMOS MINISTERIOS DE JESÚS EN JERUSALÉN (MATEO 21:1 - 25:46)
C - EL SERMÓN DE CRISTO EN EL MONTE DE LOS OLIVOS (MATEO 24:1-25:46) - LA SEXTA COLECCIÓN DE PALABRAS DE JESÚS
5. Los entregarán a tribulación (Mateo 24:9-14)MATEO 24:12-14 Cada conductor en una ciudad experimenta embotellamientos de tráfico y ve cómo otros conductores generan dificultades con su manejo imprudente. También observamos el caos cuando los niños ya no respetan a sus padres. Los estudiantes sufren las malas influencias y el acoso de sus compañeros de escuela. La grosería, el egoísmo y la injusticia se han vuelto comunes, mientras que los valores y virtudes respetados están desapareciendo. El engaño, la explotación y las mentiras son frecuentes. Si no tenemos cuidado, el veneno de este ambiente puede gradualmente afectar nuestros corazones. Es posible que también nos volvamos odiosos, impuros y hasta asesinos. Sin embargo, Cristo pone su mano sobre nosotros, nos libera del resentimiento y nos otorga su amor. Sólo la bondad de Cristo puede vencer la oscuridad de los últimos días. Quien no se esfuerza por permanecer firme en la gracia y enseñanza de Cristo puede caer, porque los caminos de Satanás son muy astutos y poderosos. Querido amigo, mira a Jesús: Cómo perdonó a sus enemigos incluso en la cruz, salvó al ladrón arrepentido y permaneció fiel frente a la ira de Dios contra nuestras ofensas. Cristo sufrió sin quejarse y amó sin interrupción. No puedes soportar el odio de otros por tu propia capacidad, pero el Señor puede fortalecerte con un amor extraordinario. Pídele que te ayude a superar la sensibilidad excesiva, a morir a tu orgullo y a olvidar tu resentimiento por cada pequeña ofensa. De lo contrario, tu corazón puede endurecerse y te separarás, poco a poco, de la comunión de los santos. Sin él no podrás hacer nada positivo. El que persevere será salvo. Cristo no espera tu perseverancia en un solo evento, sino que espera perdón continuo, alegría y misericordia hasta el final de tu vida. ¡Pero anímate! Mientras Cristo lleva tu yugo contigo, te enseña y revela cosas asombrosas y ocultas. Aprende de él, porque es manso y humilde de corazón, y encontrarás descanso para tu alma. Cristo nos dijo que, antes de que termine nuestro mundo actual, el evangelio será predicado en todo el mundo. En cuarenta años después de la muerte de Cristo, el evangelio ya se había extendido por todo el imperio romano (Romanos 10:18). El apóstol Pablo predicó el evangelio desde Jerusalén hasta Ilírico (Romanos 15:19). Los demás apóstoles tampoco fueron inactivos. La persecución de los santos en Jerusalén ayudó a dispersarlos, llevando la palabra por todas partes (Hechos 8:1-4). Irónicamente, lo que los líderes judíos intentaron evitar al crucificar a Cristo, en realidad lo facilitaron. Cuando los romanos tomaron Jerusalén en el año 70 d.C., ocurrió una mayor dispersión, o diáspora. Para ese momento, muchos ya creían en él. Incluso en tiempos de tentación, problemas y persecución, el evangelio del reino ha sido y seguirá siendo predicado. Aunque los enemigos de la iglesia se vuelvan más feroces, y muchos de sus amigos se enfríen, el evangelio será predicado. La palabra de Dios es más fuerte que cualquier oposición. El pueblo que conoce a su Dios será fortalecido para amar e instruir a muchos. El Señor Jesús nos dice que esta tierra y este universo terminarán. Entonces, ¿por qué vivimos como si nuestra vida nunca fuera a terminar? El fin quizá llegue por armas nucleares, cuando nuestro globo terráqueo desaparezca en un abrir y cerrar de ojos. Ante la incertidumbre diaria, Moisés nos dio la clave para comportarnos sabiamente al decir: "Enséñanos a contar bien nuestros días, para que nuestro corazón adquiera sabiduría" (Salmos 90:12). ORACIÓN: Señor Jesús, te agradecemos porque vienes a protegernos. Enséñanos a amar a todos y a presentarles el poder del evangelio efectivo. Enséñanos paciencia y perseverancia, mientras tus siervos en todo el mundo oran: "Ven, Señor Jesús"." PREGUNTA:
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